El confinamiento decretado desde el 14 de marzo a causa de la pandemia por el coronavirus SARS-CoV-2 ha restringido las salidas de los ciudadanos. Ante esta situación, muchos de ellos se preguntan qué deben hacer si se ponen enfermos. “De automedicación nada, todo vía online”, responde Manuel Rubio Olivares, médico de familia en el Centro de Salud de El Puig.
“Ante un determinado síntoma, el paciente debe llamar al centro de salud correspondiente y le pasarán con su médico. Si este no está disponible, le atenderá el médico que se encuentre en ese turno”, explica el doctor Rubio, quien detalla que, durante la llamada, se realiza a cada paciente un cuestionario para determinar los síntomas y aclarar cuál es el proceso a seguir. Al final de la llamada, el médico pautará una medicación o pedirá una analítica o cualquier otra prueba complementaria.
En el caso de los antibióticos, el doctor Rubio explica que el paciente podrá adquirirlos en cualquier farmacia a través de su tarjeta SIP. “Previamente, en la llamada con el médico se le habrá señalado cómo tomarlo”, aclara. Si además le piden una analítica o cualquier otra prueba complementaria, se programará para que el paciente acuda “al ambulatorio o a algún centro de especialidades a una hora determinada y respetando el distanciamiento social”.
Por su parte, Carmen Gastaldi Rodrigo, farmacéutica de Valencia, explica que a la hora de adquirir antibióticos, “siempre hace falta la receta de un médico, ya sea de la Seguridad Social, de un seguro médico privado o de una consulta privada ”. La finalidad de exigir una prescripción médica es que nadie se automedique y evitar así que un uso inadecuado de los antibióticos contribuya a incrementar las resistencias bacterianas a los antibióticos, causando su pérdida de eficacia frente a la infección. “Si se toman antibióticos cuando no hace falta puede llegar a suceder que tengas una infección bacteriana y no encuentres ningún medicamento que la combata”, insiste.
“La receta de papel de la seguridad social que se usa siempre no es necesaria en este periodo de confinamiento, los farmacéuticos solo necesitamos que nos digas tu número del SIP para ver todos los medicamentos que te ha prescrito el médico”, aclara Gastaldi, quien explica que de esta manera se evita el contacto entre el paciente y el farmacéutico.
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